El Adios [Post único no Rol]

por **Lilith** Sáb Jun 04, 2011 10:01 pm

Era una noche lluviosa, el velorio ya había terminado y todas las personas se habían retirado a sus hogares entre confundidos y tristes. Sora a pesar de su insistente idea de quedarse hasta el final, fue algo que se prohibió rotundamente, por lo tanto Illiona se la llevó a la casa para distraerla un poco.
Lennet tomo la desicion de irse del pais, ya que aun no comprendía que era lo que había pasado, como es que su hermano había terminado en esa situación tan critica luego de aquel duro combate con Hashimoto.
Ahora no quedaba mas nadie, solo una figura femenina que por primera vez en su vida, se encontraba cubierta por un vestido largo, liso, con mangas largas sueltas y un cuello largo hasta por debajo de su collar, junto con una chaqueta negra.
Aquella figura miraba una lapida con un nombre grabado... el nombre de "Nathan" con el epitafio que decía "Soportando y peleando hasta el final, un maravilloso esposo, padre, hermano y amigo recordado hasta la eternidad."
Alli estaba ella, Lilith, la esposa de Nathan, mirando con pesadez aquella lapida sin decir nada, sintiendo la lluvia caer sin siquiera impotarle que se mojara.

Fue algo que ella tampoco podía entender, aun no caía, incluso Lennet, su cuñada, le pidió que lo trajera de vuelta ya que se encontraría donde ella alguna vez vivió, pero Lilith se negó rotundamente, haciendo que la pequeña con lagrimas en los ojos simplemente se alejara con tristeza y enojo...

"¿Cómo es que terminamos asi?" se preguntaba la pelinegro mientras miraba aun la lapida, recordando aquel momento.

Nathan había vuelto a la casa completamente herido, con una energía que parecía que iba a destruirse todo. Respirando agitadamente y con mucha dificultad, se tumbó en el suelo de la mansion Akai, mientras que una gran cantidad de sangre salía por debajo de la espalda del joven de cabellos negros y cortos.
Lilith corrió para auxiliarlo, curarle las heridas rapidamente para evitar que pasará algo mas grave, pero parecía que no había llegado a Tiempo. El cuerpo de Nathan ya no soportaba más, simplemente respiró un momento, mirando a Lilith a los ojos y sonriendo levemente, diciendo una leves y bajas palabras...

"...No te preocupes... me descuide en la pelea y... terminé asi... debi... debi llamarte desde donde estaba... perdoname mi cielo... cuida mucho a nuestra hija... pidele disculpas a Lennet... se que se... molestará... y vos mi amor... gracias.. te... te... am.... o" Y no se escuchó nada más... absolutamente nada... solo se observaba un cuerpo palido y sin vida en brazos de una joven que miraba sorprendida, aterrada, la cual solo pudo gritar con fuerza, llamando la atención de toda la mansión.

-Quisiera entender que demonios pasó en esa pelea mi amor... pero no voy a quedarme con los brazos cruzados... si tengo que vengarte, lo haré sin siquiera dudarlo... pero yo que nos volveremos a ver... es lo que realmente importa, no? yo se que estas lejos, pero al mismo tiempo estas estas a mi lado... y ahora simplemente tendré que seguir adelante...- dijo la joven con un ultimo suspiro, mientras dejaba una rosa roja sobre aquella tumba, junto con una pluma negra de su ala, la cual desaparece al instante.

Alejandose de la tumba, la joven miró hacia el cielo con su mirada perdida, mientras que una lagrima en su mejilla caia en la tierra mojada de aquel solitario lugar. No se sabe si fue una lagrima o una gota de lluvia, pero lo que si se pudo notar en aquella noche, fueron sus alas abrirse con toda su intensidad, elevandose lentamente para comenzar a volar sin rumbo alguno.
No abandonaría a su familia ni por muerta... pero necesitaba unas horas mas de soledad, y en ese lugar no lo conseguiría... al menos... no por ahora.

"Hasta la eternidad.... o aun mucho más alla mi amor... yo se que si...." mientras brillaba algo en aquella tumba sin que Lilith pudiese darse cuenta.

Fin~